A siete meses del desgraciado accidente de Sergio Denis en Tucumán, la salud del cantante y, fundamentalmente, las posibilidades de su recuperación siguen siendo un interrogante de difícil resolución. Así lo publica el Diario Popular y lo comunica La Brújula.
Internado actualmente en la clínica ALCLA del barrio de Belgrano, el artista continúa inconsciente producto del daño cerebral que generó su caída del escenario al foso de la orquesta. Aun así, según reveló ayer el periodista Rodrigo Lussich, Denis sigue en estado crítico, aunque abre los ojos y hasta es trasladado por los especialistas a una silla de rueda, en busca de alentar su recuperación.
A pesar del coma, se han notado algunos avances como los que destacó su amigo de toda la vida, Diego Colombo. “Ahora lo sientan en una silla de ruedas y antes eso no se podía hacer. Incluso se puede sentar y hasta cuando abre los ojos se le nota una mirada más comprensiva”, confió uno de sus aliados quien además admitió que de a ratos escucha la radio y hasta parece generar ciertas respuestas frente a este estímulo sonoro.
Sus hermanos Mirta y Carlos junto a sus hijos y Nora, una amiga de la familia, conforman el círculo íntimo que rota para su cuidado.
En cambio, nadie vio a su última pareja Verónica Monti y hasta quienes hoy lo cuidan se encargan de desmentirla una y otra vez. “Sergio jamás hubiese tenido la intención de atentar contra su vida. Cada vez que subía a un escenario tenía la predisposición de todo artista por su escena, lo hacía con el mayor profesionalismo y jamás se hubiese querido hacer daño”, confiaron al periodista.
Casualidad o no, la habitación de Denis está separada de la de otro famoso internado, Santiago Bal. Según informaron también, hasta el momento los costos de su permanencia son altísimos. “La familia tiene un acuerdo donde lo están tratando”, confió su amigo y cerró sincero: “es muy costoso mantener un organismo en el estado en que se encuentra Sergio”, concluye Colombo. Habrá que ver si las motivaciones familiares tienen un mejor desenlace.
