Empezó una nueva búsqueda del dinero K que posiblemente esté escondido debajo de la tierra, en una de las inmensas estancias “Cruz Aike”, que el socio de los Kirchner, Lázaro Báez, compró en la Patagonia austral.
El objetivo es encontrar el “tesoro” que se conoció gracias a la investigación sobre los “cuadernos” que instruye el juez Claudio Bonadio: plata enterrada, en efectivo, originada por la corrupción de los negocios de la obra pública durante las tres gestiones de Cristina y Néstor Kirchner.
El mito de que el botín de la presunta fortuna que se juntó con bolsos “cash” en Buenos Aires y viajó en aviones a Río Gallegos se extendió con datos verosímiles hace ya varios años en Santa Cruz.
Las revelaciones de la causa de los cuadernos del chofer de Planificación Federal, Oscar Centeno, narrador puntilloso de cómo se juntaron millones de dólares en efectivo en coimas reactualizaron esas versiones. La tierra que está aun siendo removida se encuentra en uno de esos campos patagónicos.
La geografía certera no fue revelada ni por fuentes de la Justicia ni del Gobierno. Pero la información sobre ese rastreo fue aceptada como cierta por autoridades del Poder Judicial y del Ejecutivo.
Tanto en la Justicia como en el Gobierno son cautos y hasta escépticos con la posibilidad de que se encuentre la millonada escondida de la que tanto se habla.
El operativo, es realizado en el sur y empezó debido a un llamado de una persona que habría trabajado para Báez y que se contactó con el ministerio de Seguridad, de Patricia Bullrich.
Esa persona dio datos e información muy creíbles sobre esta nueva chance de encontrar el objetivo extraordinario: plata, mucha, oculta al estilo narco, en terrenos extensos y nunca explorados por las fuerzas nacionales.
Luego se sumaron otros dos que acercaron el mismo dato con una ubicación casi idéntica.
El Gobierno, a través de Bullrich, generó una medida pública que provocó agitación. Quien se anime a dar el lugar exacto en el que se podría encontrar la plata que quizás se enterró, será el dueño del 10 por ciento del monto total de lo que se encuentre.
El número telefónico que debe marcarse para ayudar a la Justicia en esta cuestión particular es el 134.
No es la primera vez que una propiedad de Lázaro Báez es objeto de un procedimiento similar. El fiscal Guillermo Marijuan, en 2016, en el marco de la causa de la Ruta del Dinero K, había viajado al sur y encabezado un operativo con retroexcavadoras en estancias del empresario.
Clarín