Está casi todo definido para el arribo de un grupo de médicos venezolanos que serán incorporados por el área de Salud municipal, pero el tema está levantando polémica a partir de algunas críticas de concejales de la oposición, que fueron respondidas por el intendente Miguel Fernández en una nota publicada por La Opinión.
En las últimas horas, Martín Sotullo Lanz -edil de Unidad Ciudadana- expuso: “No estoy de acuerdo en el tratamiento que el Departamento Ejecutivo municipal le está dando a la incorporación de profesionales de la hermana República Bolivariana de Venezuela en nuestra ciudad. De ningún modo representa invalidar las condiciones de los profesionales, pero el mensaje subliminal bajo esa decisión es malo comunitariamente. Afecta el valor positivo que los trenquelaquenches tenemos por nuestros profesionales de la salud, instalando la percepción de que no desearían realizar determinadas tareas, o bien, que sus pretensiones económicas son desmesuradas”.
Por su parte, Jorge Jordán -del Frente Renovador- anunció que pedirá un informe al respecto para conocer los fundamentos de la medida luego de destacarle a Canal 12 que no hubo una consulta por el tema a él y otros miembros del cuerpo legislativo local.
Tras esto, el intendente Fernández comentó que a su parecer “les falta información a los concejales”, argumentando que “primero sería interesante que, si van a opinar y tienen dudas, que hagan un proyecto de comunicación o levanten el teléfono. Me llaman habitualmente los concejales para otras cosas, así que si tienen dudas me pueden llamar. En segundo lugar, nosotros somos el municipio que más paga en la región a los médicos del hospital, lejos. Y en tercer lugar, por el problema que tenemos concretamente, por ejemplo en la Guardia, nosotros estamos pagando más de 11 mil pesos la guardia. Si le parece poco al concejal Sotullo Lanz me parece que tendría que ponerse en el lugar, no sólo del Municipio. Y a pesar de que somos el municipio que más paga las guardias, algo que se puede consultar con otros intendentes de la zona, no conseguimos médicos, y yo como intendente tengo la responsabilidad de asegurar la prestación del servicio”, remarcó.
Con esto, Fernández enfatizó que “esta medida no es contra nadie” y que “ojalá yo tuviera resuelto el problema con médicos argentinos que estén dispuestos a venir a vivir a Trenque Lauquen, pero la mayoría de los médicos no quiere hacer guardia, o está cansado de hacerlo, lo cual es entendible. Entonces hace falta recambio, renovación. Y me parece que para opinar a veces haría falta tener más información y escuchar todas las voces en todo caso”; agregando que si hay alguna duda puede entregarle a los concejales la planilla de los sueldos de los profesionales.
Además el intendente insistió en que “hay que conseguir médicos de guardia”, en que también hay “un enorme problema para los traslados en ambulancia”, y en que hay que “reforzar algunas áreas del Municipio, que sigue creciendo y requiere más profesionales, y si los profesionales de Buenos Aires no quieren venir, la pregunta sería cuánto habría que pagarles”. “Yo estoy permeable a si quieren hacer un proyecto de comunicación y que yo les informe. Además es facultad del Departamento Ejecutivo. Yo no le tengo que pedir permiso al Concejo Deliberante para radicar médicos o profesionales de cualquier otra área en Trenque Lauquen”, sostuvo.
Respecto al estado de la iniciativa luego de la visita de un grupo de diez médicos el pasado domingo, tras la que se vio un gran avance de la idea y una buena predisposición de los profesionales de la salud extranjeros, el intendente le contó a La Opinión que ya estuvo analizando los currículums y que en el corto plazo se estaría resolviendo qué cantidad de médicos va a absorber el Municipio y el perfil de los mismos.
Además el jefe comunal destacó haber quedado muy conforme con los currículums que vio y “sobre todo con la gente”. También destacó que “en los currículums son muy parecidos todos. Todos tienen una actitud muy positiva, con muchas ganas de trabajar, algunos con más experiencia como profesionales, pero lo que vi fundamentalmente fueron unas ganas bárbaras de trabajar. Ellos están esperando ansiosos trabajar como médicos, porque en Buenos Aires, salvo alguno, no están trabajando como médicos, a la espera de que les homologuen la matrícula”.