El interno quien está privado de libertad se encuentra en la cárcel de Las Tunas y comenzó, autorizado por el juez, a dar clases de rugby para niños y jóvenes con discapacidad en el Club FBC Argentino de la ciudad de Trenque Lauquen. Se trata de Juan Ballester. Tiene 31 años y está próximo a cumplir su condena.

En el legajo del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) evidencia una conducta ejemplar. Comenzó a practicar rugby dentro de la Unidad 20 y hoy es un jugador indiscutido en el plantel de “Los Bravos”. Además, en la semana, trabaja en la fábrica de pelotas “El Pase”, la primera cooperativa de trabajo conformada por personas privadas de libertad.

A través de la Oficina de Personas con Discapacidad del municipio local, los entrenadores voluntarios del equipo de la penitenciaría local “Los Bravos de Pincén”, Santiago Maffía, Santiago Almasqué, Francisco Barrere y Javier Pizzichini, lograron poner en marcha esta iniciativa junto al entrenador Marcos del Pino, al penitenciario Santiago Carini y a los colaboradores Carlos Grandes, Fernando Vidal e integrantes de las divisiones juveniles del Club Argentino. A su vez, gestionaron ante el juez de Ejecución Penal local la autorización para que Juan Ballester, próximo a recuperar la libertad, pudiera sumarse.

Juan, quien terminó la secundaria dentro del penal, tras recibir la visita del seleccionado de rugby inclusivo “Los Pumpas XV” descubrió su vocación. Motivado por el director de la escuela, Nelson Álvarez, y con el acompañamiento de la jefatura de Unidad, a cargo de Mario Clementi, y de su equipo de rugby intracarcelario, decidió comenzar a estudiar Educación Especial.

Finalmente, mencionó: “Siempre me gustó ayudar a la gente, pero nunca se me había cruzado hacer esto hasta que conocí a los `Pumpas XV´. Hoy, lo que más me fascina es estar con los chicos. En este nuevo camino trato de alejarme de las cosas que me hacían mal. Creo que la educación es una herramienta que te abre la mente, que te hace ver que existen otras salidas”.