El ministro de Hacienda bonaerense, Pablo López, mantuvo una reunión con intendentes de Cambiemos para empezar a analizar la deuda que la provincia mantiene con los municipios.
En la sede de la cartera económica, el ministro y los jefes municipales iniciaron un intercambio de información inicial y acordaron que acercarán a López un informe de todas las deudas que la provincia tiene con los municipios, por obras y servicios acarreados de la gestión de María Eugenia Vidal. En tanto, los alcaldes plantearon la necesidad de cobrar a corto plazo las deudas que están consolidadas, es decir aquellas sobre las que no hay dudas. Y analizar en profundidad aquellas que puedan generar controversias.
Las deudas que arrastra la administración central con los gobiernos locales tienen características muy dispares, con orígenes y montos muy diversos. Algunas son obras puntuales, otras son por deudas del Fondo de Infraestructura Municipal. También hay deudas en pagos de áreas específicas y en pago de proveedores.
Desde el gobierno dejaron trascender que fue un diálogo constructivo con los intendentes de la oposición donde se intercambió información para alcanzar un ordenamiento y priorización de la deuda.
En el encuentro participaron los intendentes Julio Garro (La Plata), Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Maximiliano Suescun (Rauch) y Miguel Fernández (Trenque Lauquen). Los cuatro asistieron como representante de todos los jefes municipales de Cambiemos.
La convocatoria del gobierno surgió en el marco de la discusión legislativa por un permiso de endeudamiento por U$D 500 millones que solicitó Axel Kicillof. La oposición puso como condición para votar ese proyecto que el gobierno abra una mesa de diálogo junto a los intendentes con el objetivo alcanzar una caracterización y consolidación de las deudas de la provincia mantiene con los municipios.
Fuentes del gobierno provincial afirman que la asistencia de la provincia a los 135 municipios ha sido permanente. Y explican que esa asistencia se intensificó con la pandemia cuando la administración de Kicillof apoyó financieramente a todos los municipios con más de $14.000 millones para el pago de salarios, la compra de insumos de salud y equipamiento y la finalización de obras de infraestructura para hacer frente a la pandemia.
El problema para los intendentes es que debían empezar a devolver ese dinero a partir de este mes. Esto se modificó en la discusión con la oposición por el endeudamiento y se acordó postergar a enero la devolución de esos fondos cedidos a los municipios para palear la crisis sanitaria.
Fuente LPO