El Gobierno está considerando volver a aplicar un impuesto del 10 por ciento a las exportaciones de maíz y trigo, según informó una persona con conocimiento directo del asunto, que pidió mantener el anonimato porque las conversaciones están en curso y todavía no se ha tomado ninguna decisión al respecto.

Los impuestos serían publicados el lunes en el Boletín Oficial, dijo la fuente. En tanto, las oficinas de prensa de los Ministerios de Agricultura y de Economía se negaron a hacer comentarios. Según el plan que se estaría considerando, los impuestos se aplicarían hasta fines de 2019, y los impuestos a las exportaciones de soja y de harina y aceite de soja se congelarían en los niveles actuales hasta fines del año próximo.

Macri planea así cambios importantes para restablecer la confianza de los mercados, dado que la economía entra en la segunda recesión en tres años y la inflación se mantiene por encima del 30 por ciento. El ministro de Economía, Nicolás Dujovne, dará a conocer un nuevo plan fiscal el próximo lunes y luego viajará a Washington para reunirse con funcionarios del Fondo Monetario Internacional para solicitar un nuevo adelanto de una línea de crédito de US$50.000 millones.

El Presidente eliminó los impuestos a las exportaciones al maíz y al trigo cuando asumió su mandato en diciembre de 2015 y se apoyó en los productores agropecuarios para revivir la economía. Los agricultores, a cambio de ello, elogiaron su llegada al poder después de años de enemistad con su antecesora, y la siembra se disparó.

Macri también empezó a reducir el impuesto a la soja y a la harina y aceite de soja. “No resulta claro dónde pueden frenar el gasto, de manera que para cerrar el déficit van a tener que suspender el recorte de impuestos”, dijo Amilcar Collante, un analista del centro de investigación económica CeSur, con sede en La Plata. Argentina es el mayor exportador de harina y aceite de soja del mundo.

Las exportaciones de cultivos del país reportaron US$21.400 millones en 2017. Después de una sequía severa este año, se estima que la producción se recuperará en 2019.

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