El Bloque de concejales Juntos por el Cambio ingresó un proyecto de Comunicación al Honorable Concejo Deliberante de Trenque Lauquen para solicitar a la Congreso de la Nación Argentina y a la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires que establezcan a la educación como servicio público esencial durante el ciclo de escolaridad obligatoria.
Asimismo solicitan al Consejo Federal de Educación establezca la presencialidad del dictado de clases durante el ciclo de escolaridad obligatoria con el cumplimiento de las medidas sanitarias correspondientes.
En tanto también, de poner en conocimiento a todos los Consejos Escolares de la provincia de Buenos Aires, gremios docentes; UDOCBA, FEB, SUTEBA, SADOP, ACIDEPBA, UPCN, y ATE.
El texto presentado por los ediles oficialista expresa en su considerando: “Que es responsabilidad indelegable del Estado garantizar la educación, y así lo ha asumido desde la Constitución original, su reforma y la incorporación de diversos Tratados Internacionales que adquirieron jerarquía constitucional”…
…” Que el regreso presencial de niños, niñas, adolescentes y jóvenes a las escuelas se hace urgente luego de su cierre durante todo el ciclo escolar del año 2020″.
“Que la recuperación del espacio escolar como centro básico del aprendizaje y el lugar donde niños, niñas y adolescentes ponen en práctica sus habilidades socioemocionales es fundamental para evitar mayores daños a su preparación educativa, como así también evitar profundizar los problemas de salud derivados por la suspensión de clases presenciales debido a la pandemia”.
“Que el valor social de la educación excede el aprendizaje y se vincula con la construcción de ciudadanía. Muchas veces la escuela es centro alimentario, medico, lugar ordenador para familias y de referencia comunitaria. La educación sirve para prevenir, detectar e impedir que los niños y jóvenes sean víctimas de violencia, cuestión que se incrementó durante la cuarentena”…
…”Que durante todo el 2020 docentes y familias han realizado un gran esfuerzo para intentar dar continuidad pedagógica a cada niño, niña o adolescente, en muchos casos asumiendo roles para los que no estamos preparados y afectando por sobre todo la funcionalidad familiar”.
“Que la virtualidad ha sido una herramienta para acompañar el proceso educativo, pero bajo ninguna circunstancia podemos pensar en ella como el remplazo de las aulas y las relaciones personales que se crean tanto entre el alumnado como con docentes. Más aún si pensamos en las patologías del alumnado o en problemas familiares que se identifican en las aulas a través del comportamiento de niños, niñas y adolescentes, o que son manifestados por los mismos en la confianza y el vínculo que generan con sus docentes”.
“Que hubo muchas y muy diversas situaciones donde los padres y madres, de los chicos cumplían tareas esenciales y debieron dejar solos y sin acompañar a sus hijos e hijas en el proceso de las clases virtuales”.
“Que numerosos docentes con hijos en edad escolar, no pudieron realizar sus tareas de docencia correctamente debido a la imposibilidad de realizar clases virtuales en paralelo a la conexión de sus hijas e hijos con sus respectivas clases”.