Los usuarios del servicio eléctrico de la Provincia deberán afrontar una nueva suba en las tarifas. A partir de este mes se incrementarán un 28 por ciento, de acuerdo a lo anticipado ayer en el gobierno bonaerense. Así lo publica hoy La Brújula.
Pero no será el único aumento que habrá en el año. Para todo 2019 se prevé un ajuste acumulado del 36 por ciento porque el Estado provincial autorizó subas adicionales del 4% en mayo y del mismo número en agosto.
Desde la administración de María Eugenia Vidal dijeron que los aumentos “han disminuido con respecto al año pasado, ya que se regularizó la situación de los subsidios” y acotaron que los ajustes que se acaban de anunciar “son para solventar los costos de funcionamiento que variaron según la inflación, como materiales y salarios”.
Las nuevas tarifas eléctricas responden a la modificación del precio mayorista dispuesto por la secretaría de Energía de la Nación y anunciado hacia fines de diciembre.
De esta forma, a partir de hoy entrará en vigencia el primer tramo de los aumentos.
En el caso de las distribuidoras del interior y las cooperativas, el aumento a partir de febrero será de 28% y acumulará en el año 36%, ya que se sumarán aumentos en mayo (4%) y agosto (4%). Con este nuevo cuadro tarifario, la factura promedio de un usuario residencial pasará de $630 a $800, según se estimó oficialmente.
“Las empresas y cooperativas están cumpliendo con los planes de inversión que presentaron a la Provincia para mejorar el servicio. La inversión hace foco en las obras en líneas de media y baja tensión”, dijeron en la Provincia.
En ese contexto, señalaron que la inversión total hacia fines de 2018 fue de 1.534 millones de pesos.
