En una medida que busca modernizar el servicio, el Gobierno habilitó a que los pasajeros de micros de larga distancia puedan presentar desde el celular un boleto electrónico comprado vía telefónica o internet. La decisión, sin embargo, no es obligatoria y dependerá de que cada empresa adopte esta nueva modalidad.
Hasta ahora, los usuarios tenían únicamente como comprobante válido de su viaje el tradicional ticket impreso que debía presentarse ante el conductor de ómnibus o la autoridad de transporte que se lo exija.
Pero eso empezará a cambiar. Al menos, voluntariamente, por parte de las empresas, según una resolución que publicó ayer la Secretaría de Gestión de la cartera de Transporte en el Boletín Oficial.
“Esta nueva posibilidad forma parte de una serie de cambios que venimos llevando adelante para modernizar el sector de larga distancia y se adapte cada vez más a los nuevos tiempos. En 2 años hicimos más cambios que en los últimos 25; todo para que la gente viaje más y para que se genere más empleo”, explicó Guillermo Kranzter, secretario de Gestión del Transporte.
Además, el funcionario afirmó: “Queremos que el colectivo sea cada vez más competitivo y que pueda complementarse con otros modos de transporte ya que en un país tan grande como el nuestro el transporte es fundamental para el turismo”.
Para ser válido, el boleto electrónico deberá contar con los siguientes datos: nombre y apellido del pasajero; nacionalidad; número de documento; empresa operadora de transporte; lugar, fecha y hora de origen y destino; con hora estimada y precio.
Entre los cambios normativos implementados se destaca la posibilidad de brindar pasajes baratos.
Desde septiembre del año pasado los micros pueden ofrecer pasajes hasta un 95% más baratos mientras sean adquiridos con al menos 10 días de anticipación, explicaron en un comunicado.
Por último la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), bajo la órbita del Ministerio de Transporte, trabaja en el control, la lucha contra la ilegalidad y la despapelización y simplificación de trámites.
Al incluir nueva tecnología en el control se redujeron los tiempos de fiscalización y se aumentó en un 70% la productividad de los agentes.