Funcionarios de la Secretaría de Comercio y representantes de las grandes empresas de consumo masivo comenzaron a negociar la renovación y ampliación del programa de Precios Cuidados, uno de los ejes a los que apuesta el Gobierno para paliar el efecto de la crisis en los sectores de menores ingresos. El Ejecutivo trabaja con dos premisas, ampliar los productos de la canasta básica con precio regulado y evitar el traslado de la devaluación a los precios que deben afrontar los consumidores.
Así lo confirmaron desde dos empresas de consumo masivo y de fuentes oficiales. Además, el ministro de Producción, Dante Sica, dijo que buscarán ampliar la distribución de Precios Cuidados a autoservicios y supermercados chinos.
Con esos ejes, el secretario de Comercio, Miguel Braun, y el subsecretario de Comercio Interior, Ignacio Werner, comienzan hoy a reunirse con las compañías, luego de haber mantenido contactos telefónicos reiterados.
La última renovación de Precios Cuidados fue en mayo, con un aumento promedio del 2,34 por ciento desde enero, inferior a la inflación del periodo. El Gobierno había bajado entonces la cantidad de productos incluido en el programa, aunque luego la amplió, como medida para paliar los efectos de la devaluación sobre la canasta básica. En la actualidad, el listado consta de 527 productos, incluyendo lámparas led (algo que el presidente Mauricio Macri anunció hace unos meses, para fomentar el traspaso a esa tecnología).
La intención oficial es que la nueva fase de precios cuidados incluya más productos de la canasta básica de alimentos y bienes esenciales.
Las empresas consultadas por ratificaron que mantendrán los productos que forman parte del programa, aunque no adelantaron si incluirán nuevos ítems. Las compañías remarcan que son bienes que venden a precios artificialmente bajos, en comparación con los competidores de las mismas categorías. Eso hace que crezca la demanda sobre esos productos y haya que asegurar un mayor abastecimiento.
Los precios de los alimentos más afectados por la devaluación son los que derivan del trigo. La harina subió más de 111 por ciento en el año, según el Indec. Es que el trigo es un commodity que cotiza en dólares.
El programa es cuatrimestral y debe renovarse este viernes. El mismo Macri anticipó ayer, en su mensaje grabado, que la ampliación de Precios Cuidados y del programa de ferias El mercado en tu barrio son herramientas para paliar la crisis. Además, anunció el pago de dos bonos a los titulares de planes sociales, en septiembre y diciembre.
Precios Cuidados fue una iniciativa que ideó el entonces ministro de Economía Axel Kicillof en 2014 y que, desde entonces, se renovó cada cuatrimestre. Con el cambio de gobierno, la nueva gestión acordó con las empresas y cambio de marcas (ingresaron más segundas marcas) y buscó un desarme gradual del programa, bajo el supuesto de que una inflación en descenso haría innecesarios los acuerdos de precios. Con la profundización de la “emergencia”, como calificó Macri a la situación actual, Precios Cuidados adquiere otro protagonismo.
Según la consultora Elypsis, la inflación de agosto fue del 4,4 por ciento, contra el 3 por ciento de julio. Los alimentos y bebidas treparon 4,6 por ciento. Eso sin contar las remarcaciones que se esperan por la devaluación del salto del dólar a $39. La inflación esperada para septiembre es del 4 por ciento, según Elypsis.
De acuerdo con el Indec, una familia tipo necesitó en julio $20.134,07 para cubrir la canasta básica de bienes y servicios con la que se mide la línea de pobreza y $ 8118,57 para cubrir los alimentos que conforman la canasta elemental que evita caer en la indigencia. La canasta básica alimentaria trepó 32,5% en un año y 22,2% desde enero. La canasta de pobreza, 34 por ciento anual y 20,7% desde que comenzó 2018.
TN