El presidente Mauricio Macri habló finalmente después del último fin de semana frenético en Olivos en donde recibió a más de una decena de dirigentes para aplicar un nuevo ajuste fiscal, con aumento de impuestos, y cambios en su esquema de Gobierno. En un discurso grabado, de cerca de 25 minutos, el jefe de Estado adelantó que durante el día se darán a conocer los detalles de cada uno de los dos puntos.
A lo largo de su discurso, el mandatario se refirió a diversos tomas, casi sin autocrítica, culpó a la situación externa, a la herencia recibida por la administración anterior y al escándalo de los cuadernos de las coimas durante el kirchnerismo. A continuación las frases más fuertes del discurso.
- Se desataron todas las tormentas juntas. Es muy positivo que el mundo nos apoye y durante dos años el mercado cambiario lo hizo. Esto que pasó ahora podía haber pasado en enero de 2016. En ese momento no había los dólares para mantener la economía.
- La situación cambió por cuestiones que están fuera de nuestro control. A la peor sequía de los 50 años se le sumó el aumento en el precio de los combustibles. Al aumento de la tasa de interés en los Estados Unidos se le sumó la batalla comercial con China.
- También nuestras dudas las generamos como argentinos porque no fuimos capaces de mostrar nuestro compromiso para las reformas estructurales. Me refiero a leyes que buscaron destruir el presupuesto.
- Pasaron cosas. Una fue el problema de Turquía, la otra fue Brasil y por supuesto los cuadernos que en el corto plazo afecta la imagen del país.Todo esto no hace más que confirmar que hasta la Argentina no tenga un presupuesto sólido.
- Vamos a pedirle a quienes tienen más capacidad para contribuir. Me refiero a los que exportan, que su aporte sea mayor. Sabemos que es un impuesto malo, malísimo. Pero les tengo que pedir que entiendan que es una emergencia y necesitamos de su apoyo.
- Con esta devaluación la pobreza va a aumentar. Vamos a estar ahí, para cuando más expuestos estén los que menos tienen.
- En cuanto al equipo de Gobierno he tomado la decisión de reducirlos a menos de la mitad. Los equipos tienen momento y cada uno necesita un equipo diferente. Vamos a compactar para tener más velocidad. Empezamos a superar la crisis.
- Los últimos cinco meses fueron los más difíciles de mi vida desde el secuestro.
- Décadas y décadas postergando este debate. Siento que llegó la hora. Es el camino difícil, pero es el real, es el del largo plazo. El cambio es un cambio de raíz, profundo, de verdad.
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