Un matrimonio en Inglaterra torturo a su hijo a tal punto que tuvieron que amputarle ambas piernas.
Hoy el padre Tony Smith se encuentra en prisión. Allí los presos lo maltratan. En las últimas horas recibió una paliza que lo dejó al borde de la muerte. Personal de seguridad logró rescatarlo.
Según lo que se pudo saber, los presos lo ataron a una silla y lo golpearon con latas de atún dentro de una media. El hombre terminó con la cuenca del ojo fracturada, varias costillas rotas y la mandíbula quebrada.
El niño, llamado Tony Smith, llegó al hospital muy mal: estaba gris, echaba espuma por la boca, tenía el cuerpo hinchado, sufría múltiples fallas orgánicas y septicemia.
Después de estabilizarlo, los doctores constataron que tenía fracturas en los muslos y en la parte inferior de las piernas, en el tobillo derecho, en el pulgar izquierdo y en el dedo gordo. Por la gran cantidad de lesiones, tuvieron que amputarle ambas piernas.
El pequeño Tony Smith fue adoptado por una nueva familia y ahora camina gracias a unas prótesis.