El Gobierno fue vencido en 15 provincias y cedió el quórum propio en la Cámara de Senadores, tras caer derrotado en seis de los ocho distritos que ponían en juego sus bancas. Pero si logró imponerse, en nueve distritos.

El triunfo electoral de Juntos incluye a los cinco distritos más poblados del país: la provincia de Buenos Aires, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza. Sin embargo, no pudo lograr su victoria en el conurbano bonaerense, donde el kirchnerismo recuperó votos perdidos en las PASO.

Lo llamativo fue que la oposición ganó en provincias que han sido históricamente peronistas, como Santa Cruz y La Pampa. A nivel nacional, Juntos cosechó, en promedio, el 41,88% de los votos, por encima de los 33,03% que consiguió el Frente de Todos.

En el caso de la provincia de Buenos Aires, los 4 puntos de distancia que había obtenido la lista encabezada por Diego Santilli-Facundo Manes a la de Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollán, se reducía a poco más de un punto.

La nueva conformación del Senado a partir del 10 de diciembre dejaría a la bancada del Frente de Todos con 35 senadores, dos menos de los que se necesitan para tener mayoría y seis menos que los que tuvo hasta el momento, mientras que el interbloque de Juntos por el Cambio pasaría de 26 a 31 y por primera vez desde el regreso de la democracia, el peronismo no será la fuerza mayoritaria de la Cámara alta.

Los comicios legislativos renovaron 24 bancas del Senado, un tercio del total de 72, al elegir en ocho provincias tres legisladores cada una: dos por la mayoría y uno por la primera minoría.