El Gobierno bonaerense adelantó que analiza disponer una medida que permita que solo los vacunados puedan ingresar a bares, restaurantes y otros lugares de esparcimiento, una iniciativa que comienza a aplicarse en Francia para fomentar la inmunización entre los más jóvenes.

El dato fue revelado por el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, en un reportaje concedido en Futurock. “Es una posibilidad, la estamos estudiando. Hoy la normativa, que vence el 6 de agosto, no lo habilita, pero lo estamos estudiando como una posibilidad. Me parece una buena medida, una medida inteligente”, aseguró el funcionario sobre la medida.

No obstante, Bianco señaló que la iniciativa busca resolver un problema que “en la provincia de Buenos Aires no tuvimos de manera masiva”, en relación a la negativa de los más jóvenes a vacunarse, como sí ocurrió en algunos países de Europa.

“De todas formas apunta a un problema que no estamos teniendo de manera masiva en la provincia de Buenos Aires; los jóvenes en Francia no se quieren vacunar, no se anotan, y a ese público cuando le ponés la obligatoriedad de vacunarse para ingresar a los lugares que le gustan, como los bares, los restaurantes y los recitales, lo terminan haciendo”, explicó Bianco.

“Le quiero agradecer públicamente a la oposición porque lograron que la gente se vacune más tratando de hacer daño y hablando en contra”, ironizó el funcionario. A su vez, recalcó que la mirada de la gestión de la campaña de inmunizaciones ahora está puesta en el grupo que va desde los 18 a los 34 años y que están preparados para avanzar con los menores de edad “en cuanto la Anmat lo autorice”.

Cabe señalar que en las últimas horas, Emmanuel Macron, mostró su enojo contra quienes se niegan a vacunarse: “Ya no tengo ninguna intención de sacrificar mi vida, mi tiempo, mi libertad y la de mis hijas por quienes se niegan a vacunarse. Esta vez se quedan ustedes en casa, no nosotros”, señaló el presidente francés en un mensaje dirigido a los grupos antivacunas que generó una fuerte repercusión.

Las medidas anunciadas por el presidente Macron buscan frenar la diseminación de la variante delta del coronavirus y proteger a los hospitales de una nueva avalancha de infectados.

En rigor, Macron anunció que se requerirán pases especiales de Covid-19 en todos los restaurantes, bares, hospitales, centros comerciales, trenes y aviones. Para obtener el pase, que serán necesarios a partir del mes próximo, las personas deberán estar plenamente vacunadas, haberse recuperado recientemente del virus o tener una prueba negativa.

Asimismo, el Gobierno francés anunció controles fronterizos más estrictos a partir del domingo, pero dijo también que permitirá el ingreso de viajeros vacunados de cualquier parte del mundo. Eso incluye a quienes han recibido la vacuna de AstraZeneca producida en India.

DIB