Hoy, 20 de enero, se cumplen diez años de la desaparición física del doctor Jorge Alberto Barracchia, quien fuera cinco veces intendente municipal de Trenque Lauquen, primero por la UCR entre los años 1987 y 2002 (períodos 1987/91,1991/95,1995/99 y 1999/mayo de 2002) y después por el Frente para la Victoria, entre 2007 y enero de 2011, además de otras funciones públicas que ejerció y que lo llevaron a quedar en la historia del distrito.
Debido a las políticas públicas que junto a sus equipos de trabajo llevó adelante en sus diferentes mandatos y que incluso fueron copiadas por otros municipios, Trenque Lauquen trascendió al país y al mundo.
Barracchia ocupó otros cargos de relevancia como secretario de Bienestar Social, concejal y Convencional Constituyente para la reforma de la Constitución de la Provincia de Buenos Aires, y cuando pasó integrar el ARI, conducido por Elisa Carrió, (después de su renuncia a la Intendencia en 2002) se postuló como candidato a senador nacional, puesto al que finalmente no accedió. Enfrentó en las urnas a dos dirigentes de mucho peso: Eduardo Duhalde y Raúl Alfonsín.
Su nombre trascendió las fronteras del distrito e incluso llegó a exponer algunas de sus ideas a nivel internacional. Fue dos veces tentado para ocupar cargos públicos de envergadura en la provincia: presidente del IOMA (Instituto de Obra Médico Asistencial) y el ministerio de Salud bonaerense.
Su legado fue el de un Trenque Lauquen de progreso, con obras de infraestructura básica para las distintas localidades del distrito e ideas innovadoras como el Prolim y la Ampliación Urbana, entre otros tantos proyectos pensados en beneficio de la comunidad.
“El Gordo”, como se lo conocía popularmente, -médico cirujano de profesión-, murió el 20 de enero del 2011 a los 63 años, después de haber participado de un acto público: la inauguración de nuevos pozos de agua potable en la calle Lagos.
En la zona de estacionamiento interno del Palacio Municipal se descompensó. Empleados de la administración municipal lo hallaron en el auto e hicieron que se lo derivara con urgencia al Hospital Dr. Pedro T. Orellana, donde a pesar de los esfuerzos de los médicos nada se pudo hacer.
El ex Intendente Barracchia, con su enorme capacidad de gestión y políticas innovadoras, dejó una huella muy profunda en la comunidad que lo recuerda como un gran líder, un “hacedor” y, sobre todo, como alguien muy comprometido con su pueblo y fiel a sus convicciones.