Durante el partido contra la albiceleste se registró una cifra inédita de audiencia televisiva.
Casi un 60% de los islandeses siguió por televisión el primer partido de la historia de su selección en un Mundial, el empate 1-1 ante Argentina. El lunes, la televisión estatal (RUV) anunció que esta cifra significa un récord de audiencia.
Islandia es un país con menos de 350.000 habitantes. Sus futbolistas se las ingeniaron para detener a la Argentina, dos veces campeona del mundo. Y su arquero pasó a la historia por atajarle un penal a Lionel Messi.
De acuerdo a lo informado por RUV, momentos antes del pitazo final, un 99,6% de los abonados estaban con el televisor encendido viendo el partido. En las tribunas del estadio, en Moscú, había unos 5.000 aficionados islandeses.
El anterior récord de audiencia para un evento deportivo se registró en 2016, cuando Islandia venció a Inglaterra (2-1) en los octavos de final de la Eurocopa de Francia. En aquel momento, un 58,8% de los islandeses siguió el encuentro desde su casa.
Para su segundo partido mundialista, el viernes en Volgogrado, Islandia se medirá en su Grupo D a Nigeria, que cayó en la primera jornada por 2-0 ante Croacia.