Debe haber sido terrorífico: la celadora miró hacia el interior de la celda y tuvo que volver a mirar porque no entendía bien qué era lo que estaba ahí. Colgado, sobre la pared, un muñeco de trapo de gran tamaño. Era el calabozo de la Unidad Penal de Mujeres de Paraná donde purga condena Nahir Galarza, condenada a prisión perpetua por el asesinato de Fernando Pastorizzo. La sentencia fue ratificada la semana pasada.
Ahora, según publicaron diversos medios entrerrianos como El Once TV, se supo que las autoridades investigan si Galarza planeaba fugarse el día de las elecciones PASO o si solo se trataba de una broma de mal gusto. De un tiempo a esta parte, Galarza viene siendo objeto de diferentes situaciones: peleas con presas, amenazas, acusaciones cruzadas. Es un encierro sin paz el de la ex estudiante de abogacía, que en 2017 mató a Pastorizzo en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú.
Pero, ¿qué hacía en su celda a un muñeco de trapo de gran tamaño y con ropa de vestir? Apenas lo vio, la celadora dio aviso a las autoridades. Desde entonces, la imagen del muñeco fue incorporada al expediente judicial de Galarza. Por el hallazgo se inició una investigación sumaria que involucra a tres personas, entre estas, a Galarza.
El jueves se confirmó la condena a prisión perpetua luego del rechazo de un pedido de su defensa para considerar ese crimen como homicidio culposo por disparos accidentales. La Cámara de Casación Penal de Concordia ratificó la sentencia impuesta en primera instancia sobre la joven de 20 años.
La Cámara sostuvo en un fallo de 44 páginas que la sentencia “ha sido absolutamente clara en establecer que entre imputada (Galarza) y víctima (Pastorizzo) existía una relación de pareja en los términos de la ley penal”.
“Como fue señalado, la evidencia permite sostener acabadamente que Fernando y Nahir habían mantenido una relación de corte sentimental durante varios años, vínculo que tuvo interrupciones temporales, pero que se pudo mantener largamente hasta escasos días antes del crimen”, señalaron los jueces en la resolución.
Este fallo de la Cámara solo puede ser apelado por la defensa de la joven ante el Tribunal Superior de Justicia entrerriano. Si es convalidado, la última oportunidad de revertir la condena a la joven será ante la Corte Suprema de Justicia.
El crimen de Fernando Pastorizzo ocurrió en la madrugada del 29 de diciembre de 2017, cuando el joven fue encontrado en una calle de Gualeguaychú con un tiro en la espalda y otro en el pecho, junto a su moto y a dos cascos tirados en el suelo.