El Intendente Municipal, Miguel Fernández, y el Subsecretario de Servicios Públicos, Adhemar Enrietti, estuvieron en el PROLIM para seguir el trabajo que personal especializado de la empresa INCOL está realizando allí, con las últimas instalaciones necesarias para que luego Camuzzi verifique la obra y se pueda poner en funcionamiento el nuevo horno pirolítico.

Según indicó el propio Intendente, la puesta del horno llegó a un avance del 95%. “Estamos llegando al final, después de un largo camino”, dijo, y en ese sentido se refirió a la envergadura de las obras que debieron llevarse a cabo para concretar la instalaciones gas, agua y eléctrica.

Fernández también señaló que se están conectando los contenedores refrigerados, donde se reservarán los residuos patogénicos. “Como todas las cosas grandes, tienen contratiempos. Hubieron muchas empresas en el medio y requisitos que cumplir”, añadió el Jefe Comunal.

Enrietti precisó que hoy personal de la empresa INCOL “está instalando lo que resta del horno. Ellos realizaron la cometida desde la red principal hasta el horno y ahora estas dos empresas deben unirse en un último caño. Aún resta el control, la verificación y prueba de encendido de la empresa Camuzzi”.

Asimismo, el funcionario indicó que “el consumo de gas y eléctrico es importante. Lo que vamos a pretender, una vez puesto a punto, es encenderlo lo menos posible; solo hacerlo cuando haya material en cantidad y por eso están los contenedores”.

Enrietti anticipó que se espera hacer funcionar el horno diez horas durante el día que se disponga el tratamiento de los patogénicos. “Todas estas obras tiene las características y la seguridad de una instalación industrial”, finalizó.