La Superliga Argentina vive sus horas más difíciles. A falta de 9 días todavía no se sabe si se reanuda en enero, por la superposición con el Preolímpico Sudamericano, más allá que de fondo asoma otro problema aún mayor.

Lo concreto es que en las últimas horas hubo reuniones de todo tipo y en diferentes lugares. Dirigentes del fútbol argentino hablaron entre ellos buscando una solución a un problema que crece día a día. Y hoy no tiene una respuesta.

Para la tarde todos los caminos conducían a una postergación de la fech 17. El consenso era casi total. Se hablaba de una o dos semanas… hasta que llegó un mensaje del Gobierno. Un importante funcionario nacional les dejó en claro a propios y extraños que ya hay varios problemas en el país como para sumar otro más. “No es momento para que no haya fútbol”, informa Diario El Día.

Así las cosas, todo volvió a foja cero. Los que más fuerza hacían para posponer el regreso de la actividad ahora están estudiando nuevas alternativas. ¿Se juega el 24 de enero o se posterga para los primeros días de febrero? Se viene un Súper miércoles para saber qué se propondrá en la reunión de Comité Ejecutivo de mañana.

Pero también dentro del Gobierno hay posturas encontradas, una marca registrada de esta Argentina. Hay un grupo que no quiere involucrarse y otro que piensa todo lo contrario.

Volviendo al fútbol, ¿qué quieren los dirigentes de la Superliga? Públicamente su discurso apunta a posponer una o dos semanas el regreso del torneo, ya que como se disputará el Preolímpico con jugadores de equipos Primera lo consideran una desventaja para quiénes los cedieron y una ayuda para los que cerraron sus puertas.

Los mismos directivos fueron los que en agosto pasado aprobaron el formato actual y en noviembre los que volvieron a darle luz verde. ¿Ahora se dieron cuenta del problema? ¿O hay otro tema de fondo que nadie, por ahora, quiere sacar ala luz?

El grupo por la negativa a comenzar lo lideran Boca, Lanús y San Lorenzo. Cerca de ellos, pero con una postura más sensata y menos radical: Independiente, Racing, Huracán, Argentinos, Estudiantes, Gimnasia, Rosario Central, Banfield, Colón, Aldosivi, Arsenal y Central Córdoba.

Del otro lado se pararon River, Vélez, Newell’s, Talleres, Atlético Tucumán, Defensa Justicia, Unión, Patronato y Godoy Cruz.

“Nosotros ya tenemos comprados los pasajes para jugar el domingo 26 contra Racing. Armamos la logística con bastante tiempo”, declaró ayer Marcelo Leíto, presidente de Atlético Tucumán, uno de los clubes que presiona para jugar cuando fue resuelto, aunque aclaró que acatarán lo solicitado “por la mayoría”.

En otro orden, Jorge Brito, vicepresidente de la Superliga y de River, aseguró: “No le encuentro la punta al planteo de los que quieren postergar la reanudación del torneo, me gustaría escuchar otras voces y entender lo que plantean porque no hay otro momento para jugar los partidos”.

La excusa visible del sector que pide la postergación es el Preolímpico Sub 23, que se jugará en Colombia entre el 18 de enero y el 9 de febrero, aunque por lo bajo piden la vuelta a la AFA y la inmediata salida de Mariano Elizondo, CEO de la Superliga, y un nuevo esquema de distribución de ingresos de la televisión.

“No estamos de acuerdo con el doble comando. Debería haber uno solo y ese es AFA”, disparó el presidente de Boca Jorge Amor Ameal, dejando visible un reclamo que en los últimos días empezó a ser más fuerte: un sector fuerte del fútbol argentino quiere regresar a la casa madre del fútbol.

“Hay que discutir si queremos volver a la AFA o seguir en la Superliga. Yo no quiero volver a una AFA donde hay que golpear la puerta para que nos den un cheque a 60 días”, afirmó el presidente de Atlético Tucumán, en la vereda opuesta.

EL POSTERGADO SE JUEGA SEGURO EL DOMINGO

Más allá de todo lo que está en discusión, informaron desde Superliga que el partido programado para el domingo a las 19.10 entre Independiente y River en el estadio Libertadores de América se jugará, tal como está previsto.
“No es momento para que no haya fútbol”, sostienen desde el Gobierno. ¿Le harán caso?